Eminencia del cine mexicano entre los años cuarenta y cincuenta, el director y actor Emilio Fernández dirige, en 1946, Enamorada, una historia de amor que se desarrolla en el contexto de la revolución mexicana. Cannes Classics nos brinda la oportunidad de dejarnos llevar una vez más por esta obra maestra novelesca con una proyección de la película en copia restaurada, presentada por Martin Scorsese de la mano de The Film Foundation.
Aunque estaba destinado a realizar una carrera militar, Emilio Fernández, apodado «El Indio» por sus orígenes amerindios, apuesta por el camino del séptimo arte a principios de los años cuarenta, y alcanza el reconocimiento internacional con María Candelaria, que recibe el Grand Prix del Festival de Cannes en 1946.
Cineasta comprometido y revolucionario, ensalza a la clase obrera mexicana y ofrece en sus películas la visión de una nación marcada por su legado y sus ritos, como la religión, la revolución, los indígenas o la familia.
Una particularidad que se pone de manifiesto en Enamorada, una película que ilustra personajes fuertes, seductores, pero que también están sujetos a las tradiciones de su país. La revolución mexicana sirve de telón de fondo de una historia de amor incipiente entre un alborotador y una aristócrata. Cuando José Juan Reyes, general de las tropas, invade la ciudad de Cholula para apropiarse de los bienes de los ricos, cae rendido ante el encanto de Beatriz Peñafiel, hija del hombre más acaudalado del lugar. Cautivado por la belleza de esta mujer, pero desconcertado por su arrogancia, está dispuesto a hacer todo lo posible para seducirla.
Más allá de la historia de amor ardua y sensual que narra la película, Enamorada presenta al público a la elegante e irresistible actriz María Félix, que se convertirá en una leyenda del cine mexicano, llamando la atención, entre otros, de Jean Renoir y Luis Buñuel, con los que trabajará más adelante. Festival de Cannes