Cannes (Francia), 17 may (EFE).- Son jóvenes de Senegal que sueñan con llegar a España en busca de una vida mejor y no dudan en arriesgar sus vidas en el mar. Es lo que cuenta "Atlantique", de la senegalesa Mati Diop, un drama sobre la inmigración que hoy se situó en el centro de la atención del festival de Cannes.
La vida sin oportunidades en Dakar fuerza a los chicos del filme a enrolarse en un viaje con un final muy dudoso, en un mar "que es como una fuerza de la naturaleza que se traga la juventud", explicó la realizadora en rueda de prensa.
Ella quería que el océano Atlántico tuviera voz en el filme, hacerle hablar, pero se dio cuenta de que "solo su presencia ya era suficientemente elocuente".
El mar se transforma como lo hace la protagonista del filme, Ada (Mame Bineta Sane), una joven, casi una adolescente, que está a punto de casarse con el rico Omar pero que está enamorada del pobre Suleiman, que es uno de los que decide buscar su sueño a través del mar.
Una ópera prima con la que Diop profundiza en un tema que ya trató en su primer cortometraje, "Atlantiques" (2009), que realizó tras regresar a su país después de una ausencia de diez años al sentir como la realidad le golpeaba duramente.
"Me encontré con que había muchísimas personas que dejaban Senegal para irse a España, para huir de un enorme paro y con la perspectiva de un futuro mejor. Llegué a mi país en un momento muy oscuro y decidí poner mi cine y mis herramientas al servicio de esa situación", resaltó Diop.
El cortometraje contaba la historia de un solo joven que había hecho ese viaje pero a la hora de hacer el largo se centró en las mujeres que se quedaba esperando en Senegal.
Quería contar "la realidad de los desaparecidos en el mar a través de la mirada de una mujer" y reflejar como una parte de la juventud de Senegal ha desaparecido en el mar.
Y añadiéndole una dimensión mitológica y fantástica, la del mar que se lleva a los jóvenes pero también los devuelve,
A sus 38 años, Diop es la primer mujer senegalesa y la primera directora negra que compite en el Festival de Cannes, algo que le enorgullece pero que también le entristece.
"Hemos tenido que esperar mucho tiempo para que esto ocurra, para que una mujer realizadora negra esté en competición de Cannes. Yo lo sabía, pero el hecho de que me seleccionaran me recordó que hay que trabajar duro para que esto se convierta en algo normal", señaló Diop.
"Yo no soy más que una pequeña historia dentro de una historia mucho más grande (...) pero sé que los símbolos son extremadamente importantes para todo el mundo y es muy importante poder identificarse con alguien, tener referencias para los jóvenes", precisó. Cultura