12 de septiembre, 2016 (RT). El Financial Times ha publicado una entrevista con Edward Snowden, exempleado de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) y el hombre más buscado del mundo después de que revelara el alcance del espionaje electrónico masivo de EUA.
Según sus palabras, dedica casi todo su tiempo disponible a hablar en público (para pagar las facturas) y a diseñar herramientas para aumentar el nivel de seguridad digital de los periodistas.
Recientamente, el exagente tuvo la oportunidad de ver la película que Oliver Stone hizo sobre él durante uno de los viajes que el popular cineasta hizo a Moscú. También aprovechó la ocasión para hablar con el coguionista de Stone, Kieran Fitzgerald, tratando de hacer la película "un poco más real". Aunque Snowden se negó a calificarla en una escala del 1 a 10, admitió que es lo más cerca posible de la realidad en lo que a sus aspectos políticos se refiere.
Durante el rodaje, Snowden se reunió también con Gordon-Levitt, el actor protagonista. "Almorzamos, hablamos durante horas sobre prácticamente todo, nuestras vidas personales, sobre lo que pensamos, lo que nos importa", comentó él. Tras ver la película, cuyo estreno está previsto para el 16 de septiembre, Snowden quedó impresionado por la interpretación de Gordon-Levitt.
Interpelado sobre los candidatos de las elecciones presidenciales de EUA, Snowden dijo que un país donde viven 330 millones de personas "debería tener una opción mejor" que Hillary Clinton o Donald Trump, cuyas vidas —dijo— "dependen de escándalos".
Según reconoce, su nivel del ruso le basta para hacer un pedido en un restaurante. "Todo mi trabajo está en inglés, no tengo muchas conexiones con Rusia. Aunque esto puede sonar loco, yo planeo irme", explica Snowden. Su abogado, Ben Wizner, está preparando a una petición de indulto de Snowden al presidente norteamericano, Barack Obama. Sin embargo, el antiguo analista de la NSA duda que la iniciativa tenga éxito.
Edward Snowden, exempleado de la CIA y de la NSA, se dio a conocer a nivel internacional tras una serie de revelaciones sobre el espionaje de la NSA. Se vio obligado a escapar de EUA y pidió asilo temporal en Rusia, que se lo concedió en agosto de 2013.