Uno de los protagonistas indiscutibles de esta 62 edición del festival fue Denzel Washington quien recibió el Premio Donostia en reconocimiento a su carrera.
“No hablo español pero en mi corazón soy español. Quiero daros las gracias a todos por apreciar el trabajo que he intentado realizar durante todos estos años”, explicó Washington desde el escenario tras recibir el galardón.
El actor estadounidense presentó en San Sebastián su último trabajo, “The Equalizer”, de Antoine Fuqua, película en la que interpreta a un antiguo agente de la CIA que dedice iniciar una nueva vida.
Diecisiete realizadores compiten este año por la Concha de Oro. Esta edición del festival cuenta, además, con una importante representación del cine español.
“El objetivo principal del festival este año es ofrecer buen cine, ofrecer un panorama de lo que se está haciendo en el mundo lo más variado y de la mayor calidad posible. Pero también tenemos algunos objetivos colaterales como consolidar de alguna manera las actividades de industria que en los dos últimos años hemos desarrollado, como el Foro de Coproducción entre Europa y América Latina, consolidar también que este festival sea la puerta de entrada en Europa para el cine latinoamericano y consolidar, por último, que todo el que se interese por el cine español sepa que aquí va a encontrar todo lo que ha pasado en el último año”, explica José Luís Rebordinos, director del festival.
“La isla mínima” es una de las películas españolas de la sección oficial. Dirigida por Alberto Rodríguez, el filme nos cuenta la historia de dos policías que son enviados a un remoto pueblo de las marismas del Guadalquivir para investigar la desaparición de dos adolescentes.
“Una película mexicana y otra venezolana ganaron los premios más importantes de la última edición del festival. Muchos de los mejores directores del Viejo Continente intentarán que Europa vuelva a brillar en San Sebastián”, explica Carlos Marlasca, nuestro enviado especial.
