Una de las representantes de la nueva generación de cineastas presidirá el jurado de la Caméra d’or. Rodeada por seis profesionales, la directora suiza Ursula Meier elegirá la mejor obra novel presentada en Selección oficial, la Semana de la Crítica o la Quincena de Realizadores.
Ursula Meier es una cineasta que se interroga sobre la necesidad de filmar. Esa es sin duda la razón de ser de una filmografía intensa y apasionante, que está compuesta por cinco cortometrajes, dos obras para la televisión, dos documentales y dos largometrajes para el cine. Son otros tantos golpes de efecto inventivos que revolucionaron el panorama gracias a su frescura y la elevaron por méritos propios en el paisaje europeo. Desde 1994, Ursula Meier realiza una cinematografía audaz que subraya la complejidad del mundo.
Admiradora incondicional de Wanda (Barbara Loden) o Sweetie (Jane Campion), decidió pasar a la dirección tras descubrir El dinero (L'argent, Robert Bresson). Se convirtió entonces en asistente de dirección de una gran figura del cine suizo, Alain Tanner, con Fourbi (1996). Ella, que reconoce su fascinación por ese espacio que es tierra de nadie, construyó a partir de ahí su imaginario y logró abordar zonas escondidas de la naturaleza humana, filmando con ternura, sin énfasis ni juicios, personajes guiados por un poderoso instinto de supervivencia. En 2014, participó en la película Les Ponts de Sarajevo, obra colectiva en la que participaron trece cineastas europeos, presentada en Cannes en Selección oficial.
La primera película es ese lugar donde todo es posible, todas las audacias, todos los riesgos, todas las locuras.
Sus películas para el cine – Home ¿Dulce hogar? (Home, 2008) y Sister (L'enfant d'en haut, 2012), que obtuvo el Oso de Plata en la Berlinale – fueron internacionalmente elogiadas por la originalidad de su mirada y su escritura. Radical y poética, la primera es una fábula de luz pálida y fotografía cálida. La segunda es un cuento moderno en forma de crónica familiar sombría y punzante.
«Una primera película», declara la recién nombrada presidenta, «es ese lugar donde todo es posible, todas las audacias, todos los riesgos, todas las locuras. Se dice a menudo que no hace falta poner todo dentro de la primera película pero es todo lo contrario, hay que ponerlo todo dentro de una primera película, todo, como hay que ponerlo todo en cada película, conservando siempre dentro de uno mismo ese deseo original, vital, brutal, salvaje de la primera vez. ¡Qué inmensa excitación y qué inmensa alegría descubrir todas estas películas!».
Ursula Meier y su jurado entregarán el premio de la Caméra d’or durante la velada de clausura del Festival de Cannes, el sábado 19 de mayo. La película premiada sucederá a Jeune Femme de Léonor Serraille, presentada en Selección oficial – Un Certain Regard el año pasado. Cannes