Málaga (EFE). El cineasta mexicano Roberto Sneider mostró lo complejo de una relación de pareja protagonizada por Gael García Bernal y Verónica Echegui en "Me estás matando Susana", presentada hoy en la sección oficial a concurso del vigésimo Festival de Cine en Español de Málaga.
La película cuenta el viaje a Estados Unidos que Eligio (Gael García Bernal) se ve obligado a hacer para recuperar a su mujer (Verónica Echegui) y cómo en ese viaje se enfrenta no sólo a un invierno helado y a una cultura que le es ajena, sino también a las contradicciones entre el amor a su pareja y su carácter machista.
La novela en que está basada, "Ciudades desiertas", de José Agustín, "tiene sentido del humor, pero habla de una manera honesta y seria de la relación entre México y EE.UU.", afirmó en rueda de prensa Sneider.
La conclusión que se saca de la historia puede ser que "no hay quien entienda a las mujeres, y a los hombres tampoco", según el director, que optó por mostrar el punto de vista del protagonista masculino, mientras que la novela arranca con la visión de ella.
"La novela empieza con el punto de vista estrictamente de ella, cuenta por qué se va a Estados Unidos y después cambia al punto de vista de él. A mí me gustó la subjetividad de él cien por cien, meternos en su cabeza y ver cómo veía esta historia. Ofrecer el otro punto de vista nos sacaba del viaje de este personaje".
Considera que el personaje de García Bernal "no se considera a sí mismo un machista, pero está reaccionando en esta situación así", y esto "es algo que sucede en México y en otras muchas partes del mundo, no es exclusivo de México para nada".
Sobre la elección de Verónica Echegui, señaló que no la conocía, pero fue Gael García Bernal quien le habló de ella y descubrió que había "química" entre ambos.
Ello llevó a que la protagonista fuera española, lo que colaboraba con la historia porque le otorgaba una "distancia crítica" respecto a "comportamientos del protagonista que pudieran parecer más normales en México".
Uno de los aspectos de la novela que más gustó a Sneider es que "no juzga, describe", por lo que espera que no se "simplifiquen" los comportamientos del protagonista, porque eso sería "contrario al espíritu de la novela".
"Las relaciones entre personas son complicadas, cambian de afectos y de retos, y he contado una historia que es como es, no es de moralina ni con un mensaje", resaltó Sneider.
El cineasta mexicano calificó de "muy afortunado" el cambio de filosofía del Festival de Málaga al integrar en su sección oficial a todo el cine en español y se ha mostrado feliz de estar en esta primera edición con el nuevo formato.
